La Rioja entera está llena de pueblos con mucho encanto que te transportan a otras épocas y te hacen imaginar cómo fue la vida en esas mismas calles hace 50, 100 o 500 años.
No cabe duda de que si recorrieses pueblo a pueblo La Rioja encontrarías en cada uno de ellos más de un motivo que justificase su visita.
Sin embargo, a menudo el tiempo no nos permite explorar el territorio con el detenimiento que se merece. Y es por eso que existen listados como este donde se intenta recoger una muestra de la zona que represente fielmente todo el encanto que alberga.
En este artículo encontrarás 5 pueblos cerca de Haro en La Rioja Alta que cumplen con creces este cometido.
Aunque la cercanía entre todos ellos es una realidad, los 3 primeros, Cuzcurrita, Sajazarra y Cellorigo, se encuentran especialmente próximos entre sí, al igual que Briones y San Vicente de la Sonsierra.
Veamos que secretos esconden estos 5 pueblos riojalteños.
1. Cuzcurrita de Río Tirón un pueblo mágico
Cuzcurrita de Río Tirón es un pueblo de unos 500 habitantes lleno de rincones únicos donde se respira historia, cultura y naturaleza.
Su casco antiguo es de gran belleza lleno de casonas con escudos y edificios históricos como la iglesia de San Miguel o el castillo de los Velasco entre otros. Y todo ello bañado por el río Tirón que cruza la Villa rodeado de jardines.
Fue el primer pueblo mágico de España de La Rioja y podrás descubrir esa magia con tan solo pasear por sus calles.
Iglesia de San Miguel Arcángel de Cuzcurrita
En la Plaza Mayor se alza imponente la Custodia de La Rioja, la imponente Iglesia de San Miguel, un edificio del siglo XVIII en el que confluyen el barroco italiano de la fachada principal con el riojano de la torre que corona la misma.
Castillo de los Velasco en Cuzcurrita de Río Tirón
También en el casco histórico se encuentra el castillo que fue construido a finales del siglo XV por Pedro Suárez de Figueroa. Se trata de un recinto amurallado con cubos en los ángulos y una esbelta torre del homenaje, que no tiene ninguna ventana en sus muros.
En el siglo XVI, durante el reinado de Felipe II, Pedro de Velasco, IX señor de Cuzcurrita, fundó mayorazgo al casarse con Marta de Rojas y Osorio, labrando el escudo de armas de la portada en arco apuntado en el muro norte, defendida por un bello matacán.
En la parte trasera del castillo, junto al lavadero, está la cascada que cae desde el canal que nace en la presa y vuelve a juntarse con el Tirón en este punto.
El Bolo y Barrio de las Bodegas de Cuzcurrita
Cuzcurrita al igual que muchos pueblos de La Rioja cuenta con un barrio de cuevas excavadas en la piedra y utilizadas como bodegas. Cuzcurrita llegó a tener 240 bodegas de este tipo excavadas a los pies del monte El Bolo con 4 alturas diferentes. Sin embargo, un derrumbe de dicho monte destruyó un número importante de estas construcciones.
A lo alto del Bolo se encuentra la el Rollo que era símbolo del señorío ejercido sobre la Villa.
El Bolo ha sido siempre el mirador por excelencia de Cuzcurrita, desde él se ve la totalidad de la villa, así como otras localidades próximas.
El Trinquete y el Lavadero
Hasta que en 1999 se inauguró el nuevo polideportivo, en Cuzcurrita se jugaba a la pelota en el Trinquete, un frontón construido en el siglo XIX en piedra de sillería con 3 paredes.
Pasando por debajo del puente nos encontramos con el lavadero construido en 1862 junto al Tirón donde hasta el siglo XX acudían las gentes de Cuzcurrita a lavar a mano.
Junto al lavadero se encuentra un antiguo molino harinero del siglo XVIII que fue utilizado más tarde como central eléctrica.
El Puente de Piedra y el Puente de Madera
El puente de piedra se construyó en el siglo XV y entre los siglos XVIII y XIX fue remodelado y ensanchado. Conecta el núcleo del pueblo con el barrio de las bodegas, además de ser un paso necesario para llegar a otras localidades. Desde el puente de piedra de Cuzcurrita pueden verse los monumentos más representativos de la villa, como el castillo y la iglesia.
El puente de madera es una pasarela peatonal que se construyó en la primera década del siglo XX en el mismo lugar en que había un puente anterior de madera.
El Tirón y La Presa de Cuzcurrita
Por Cuzcurrita pasa el río Tirón tal y como indica su apellido. Siendo este un elemento clave en la vida del pueblo y dotando de belleza a la villa con parques y paseos a ambos lados del mismo.
Desde la cascada del castillo comienza un sendero que conduce hasta la presa, zona de baño por excelencia de Cuzcurrita. Se trata de un paseo agradable entre chopos al pie del canal.
Las Ermitas de Sorejana y Tironcillo
La Ermita de Nuestra Señora de Sorejana se encuentra a 1,5 km de Cuzcurrita río arriba.
Se trata de una construcción de estilo Románico tardío del siglo XIII. La pila bautismal del siglo XII se encuentra en la iglesia de San Miguel.
A los pies del templo se haya una necrópolis de lo que fue el poblado de Sorejana.
Por su parte, la Ermita de Nuestra Señora de Tironcillo se sitúa a 3 km de Cuzcurrita aguas abajo del río Tirón cerca de las localidades colindantes de Tirgo y Cihuri.
Fue construida a mediados del siglo XVIII en estilo barroco.
Para alojarte en Cuzcurrita te recomendamos Hotel Teatrisso y Apartamentos Casa Antonia.
Y si buscas una experiencia única Globos Arcoiris ofrece su completa experiencia de vuelo en Globo desde sus instalaciones en Cuzcurrita.
*Si quieres un aperitivo antes de visitar Cuzcurrita puedes dar un paseo virtual por sus calles.
*Apenas a 6 kilómetros de Cuzcurrita se encuentra Sajazarra.
2. Sajazarra uno de los pueblos más bonitos de España
Sajazarra es un pueblo con unos 130 habitantes y fue el primer pueblo de La Rioja declarado uno de los más bonitos de España.
Se trata de una pequeña localidad que puedes recorrer en apenas 1 hora, pero que te sorprenderá por su imponente castillo y algunos detalles curiosos en sus calles.
Puedes aparcar en el parking que hay en la entrada del pueblo ya que el tráfico está limitado en el interior.
Castillo de Sajazarra en La Rioja Alta
En el siglo XV existía en Sajazarra una primitiva torre que fue destruida para construir el castillo que un siglo después, siguió sufriendo remodelaciones y cambios hasta convertirse en la imponente construcción que podemos ver hoy.
Su historia está unida a la de Haro que, en 1430, pasó a manos castellanas. Su propietario, Pedro Fernández de Velasco, poseía, además, otros castillos como el de Cerezo, el de Ojacastro y el de Arnedo. Perteneció a los condes de Nieva y defendía la zona norte de la población y el camino de Haro a Miranda.
La torre del homenaje se eleva por encima del resto de la construcción. Se encuentra en el centro de la fortaleza, su planta es rectangular y posee en sus ángulos cuatro garitones de forma octogonal.
La entrada se encuentra enmarcada por dos cubos que sirven de ayuda para su defensa. Parece que la fortaleza tuvo un foso que hoy se encuentra tapado.
Como todos estos edificios, el material utilizado para su construcción fue la piedra. Su estado de conservación es muy bueno siendo su titularidad privada.
Iglesia de Santa María de la Asunción
La iglesia de la Asunción de Sajazarra data del siglo XII. Construida en piedra de sillería y mampostería es la suma de construcciones de varias épocas.
En su interior descansa la imagen de la Virgen de la Antigua y cuenta con un retablo renacentista.
Restos de la muralla y puerta del Arco
El trazado de la muralla, de forma trapezoidal, es de la segunda mitad del XIII, de la época de Alfonso X el Sabio, y a día de hoy solo se puede reconocer en las traseras de las casas.
De las cuatro puertas que poseía Sajazarra se conserva la denominada el Arco, situada entre la iglesia y el Ayuntamiento viejo, gótica de los siglos XIV o XV.
Ermita de Santa María de Cillas
A un kilómetro y medio de Sajazarra en dirección a Castilseco se encuentra la Ermita de Cillas.
Se trata de un edificio románico herreriano, de sillería y mampostería del siglo XIII.
Fue reformada entre los siglos XVI y XVIII, y posteriormente, en 1945.
Posee un retablo neoclásico, obrado por Leonardo Gurrea hacia 1804, así como púlpito y facistol barrocos. De esta ermita procede la Virgen de Cillas, patrona de la villa y que hoy se encuentra en la parroquia.
*Siguiendo la carretera LR-209 llegas a Cellorigo, otro de los pueblos cerca de Haro que recomendamos visitar, se encuentra a 8 kilómetros de Sajazarra.
Pero antes de llegar a Cellorigo por la LR-209 hay un desvío a Castilseco donde se encuentra Bodegas Ruiz Alfaya con Winebar, un rincón donde parar a disfrutar de un vino y una tapa.
3. Cellorigo el púlpito de La Rioja
Cellorigo se encuentra a 782 metros de altitud y cuenta con apenas 10 habitantes siendo uno de los pueblos cerca de Haro más deshabitados.
Su estratégico enclave hizo que hubiera un castillo del que hay referencias entorno al siglo X, pero del que hoy no existen ni las ruinas.
De este pintoresco pueblo nos interesan sus magníficas vistas, así como su patrimonio, siendo, además, punto de partida de diferentes rutas de senderismo.
Ermita de Santa María del Barrio
Unos 500 metros antes de llegar a Cellorigo por la carretera principal puedes visitar las ruinas de la ermita de Santa María del Barrio.
Templo románico construido en el siglo XII que sufrió una reforma total alrededor del siglo XVIII aprovechándose la cabecera recta del santuario primitivo.
Iglesia parroquial de San Millán en Cellorigo
La iglesia actual se encuentra construida sobre otra anterior datada de los siglos X y XI, de estilo mozárabe que tenía advocación a San Millán y Santiago. La construcción actual data del siglo xv, aunque con reconstrucciones posteriores.
La iglesia se construyó en sillería y tiene la singularidad de estar compuesta de dos naves, divididas en tres tramos. Destaca la torre de cuatro cuerpos, realizada por Juan de Terrenos en 1598, y la sacristía situada en el tramo central realizada en el 1734 por Matías Estanillo. Junto a ella se encuentra la capilla de Santa Ana construida en 1714 por Martín Eleajalde.
El pórtico está cubierto por techumbre de madera, dónde llaman la atención las puertas del siglo XVIII y la rejería de hierro del XVI. En el interior se encuentra la capilla sepulcral de Juan Frías Salazar, muerto a finales de siglo XV, con un sepulcro con la imagen yacente.
El retablo mayor es del siglo XVII en estilo clasicista, en tres cuerpos divididos en tres calles, presidido en el centro por una talla de San Millán Matamoros.
La Fuente Vieja y Rutas de Senderismo
La Fuente Vieja se encuentra en la vertiente norte y cuenta con una cubierta del siglo XVIII.
Desde Cellorigo nacen diferentes rutas de senderismo que te adentran en sus montes y te permiten pasar la frontera a Burgos entre senderos.
4. Briones otro de los pueblos más bonitos de España
Briones cuenta unos 750 habitantes y desde 2018 es considerado uno de los pueblos más bonitos de España.
No tardarás en descubrir por qué. Basta un paseo tranquilo por sus calles para apreciar el encanto de esta localidad.
Además, en Briones el paisaje riojano aparece en todo su esplendor con hectáreas de cultivo vitivinícola.
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en Briones
La iglesia de la Asunción fue construida en el siglo XVI, de fábrica de sillería y concebida en planta de salón, según el estilo gótico isabelino.
Realizada en cinco tramos, se complementa con una cabecera ochavada de tres paños, coro alto con órgano barroco, capillas laterales y sacristía.
La torre barroca, perteneciente al llamado “estilo riojano”, fue construida por Martín de Beratúa y Martín de Arbe.
Palacio del Marqués de San Nicolas – Ayuntamiento
Se trata de la característica construcción de la arquitectura civil barroca de La Rioja en el siglo XVIII. Este palacio fue mandado construir por don Esteban de Francia, segundo Marques de San Nicolás.
Esta construido en piedra con fachada principal a la Plaza España y otra a la Cerca con igual distribución, pero más sencilla de decoración. En el siglo pasado, al ser nombrado alcalde el Marqués, trasladó a su casa las dependencias municipales y con el tiempo el Ayuntamiento de Briones quedó establecido definitivamente en él.
En la actualidad el Palacio del Marqués de San Nicolás es propiedad de la Comunidad Autónoma de La Rioja y tras una profunda restauración llevada a cabo por el Ministerio de Cultura que finalizó en 1996, comparte su espacio con el Ayuntamiento de La Villa y el Centro de Exposiciones.
Incluye la Casa Encantada o Museo Etnográfico que evoca una casa tradicional de La Rioja que muestra cómo vivían las gentes de nuestros pueblos hasta mediados del siglo XX.
Torre del homenaje de Briones
La antigua fortaleza de Briones cuya configuración urbana nació del propio carácter defensivo que a lo largo de la historia tuvo este privilegiado lugar, frontera entre Castilla y Navarra.
Sabemos que en 1240 el castillo de Briones y otros varios que tenía D. Diego López de Haro, fueron derribados por Fernando III.
El recinto del castillo se completaba con el del casco urbano mediante murallas en las que se abrían 6 puertas.
La construcción se extiende de noreste a suroeste siguiendo un trazado trapezoidal alargado. Del recinto del castillo solo se conserva parte de la muralla exterior, de la que existe un lienzo, de 2 metros de grosor asentado sobre la roca y construido en mampostería con sillares de refuerzo.
En el extremo suroeste se cerraba el recinto con la Torre de Homenaje, construida en sillería con tres plantas y coronada por una cornisa sobre canes de matacán, se derrumbó en 1940 aunque se conservan tres paños que fueron restaurados en 2005.
Briones y sus 7 ermitas
Ermita de San Juan o del Cristo de los Remedios:
Construida en el siglo XVIII sobre otro templo anterior, es un edificio de sillería de arenisca ejemplo de la cantería riojana de la época. Se trata de un templo con planta octogonal y de líneas curvas envolventes.
Ermita de los Santos Mártires:
A escasos 2 km del pueblo, en la ladera Sur del cerro de Mendiguera se sitúa la ermita de Los Mártires, como resto de un antiguo poblado. Fue construida en el siglo XV con planta rectangular de una sola nave dividida en cinco tramos.
Muy cerca de esta ubicación se pueden visitar unos lagares rupestres.
Ermita de la Concepción:
De nuevo nos encontramos en un enclave que fue un poblado en el pasado y donde a día de hoy podemos encontrar la Ermina de la Concepción, a unos 5 km del casco urbano de Briones.
Construida en el siglo XVII, su cabecera la ocupa un elegante retablo romanista que hicieron a finales del siglo XVI Pedro de Arbulo y Hernando de Murillas el Viejo.
Ermita de Santa Lucia:
Enclavada en un bello paisaje a medio kilómetro del pueblo, presenta una sola nave de seis tramos cuya cabecera parece obra del siglo XVI, aunque haya sufrido luego sucesivas ampliaciones.
Ermita de San Andrés:
Se erige próxima a la de Santa Lucia y sobre el mismo camino, fue construida en el siglo XVI utilizando sillares de las canteras de la zona próxima al Ebro.
Ermita de San Bartolomé:
A unos dos kilómetros al noroeste de Briones, sobre un alto con unas magníficas vistas del valle del Ebro se encuentra la ermita de San Bartolomé.
Se trata de un sencillo edificio mitad rupestre excavado en roca viva mitad construido en mampostería.
Se encuentra totalmente hundida.
Ermita del Calvario:
Pequeña construcción a escasos kilómetros del centro e Briones.
Para alojarte en Briones te recomendamos El Mesón una casa rural de las de toda la vida, y si lo que prefieres es una estancia de lujo te encantará Santa María Briones, un hotel boutique de 4* con su restaurante Allegar. Además, puedes disfrutar de una visita y cata a bodega familiar de la mano de Bodegas Betolaza.
*Siguiendo la carretera LR-210 llegas a San Vicente de la Sonsierra en apenas 4 kilómetos.
5. San Vicente de la Sonsierra un mar de viñedos
San Vicente de la Sonsierra cuenta con 1.000 habitantes y ostenta el título de Villa Divisera por su estratégica localización.
Sus vistas del paisaje del viñedo riojano, del curso del rio Ebro y de la Sonsierra te dejarán con la boca abierta.
Además, San Vicente cuenta con un extenso patrimonio historio que abarca diferentes épocas y en buen estado de conservación.
Puente Medieval sobre el río Ebro
El puente de San Vicente de la Sonsierra se sitúa al oeste de la población, bajo el castillo, en la carretera local de Briones a Peñacerrada. Es lo primero que vemos si accedemos desde esta carretera.
Por su excelente posición, defendía el paso del Ebro de la frontera de Navarra con Castilla. Es posible que su existencia se remonte a 1172, no obstante, lo más antiguo conservado puede remontarse al siglo XIII.
Constaba de trece arcos apuntados, sobre pilas tajamares triangulares y espolones rectangulares y dos torres defensivas, una en el centro, y, probablemente, otra en el acceso de la margen izquierda. Esta construcción fue reedificada a finales del siglo XVI, transformándose en un puente de doce arcos y una sola torre.
Está construido en sillería y mampostería. Actualmente tiene nueve arcos, de distintas luces y formas.
Iglesia parroquial de Santa María la Mayor
La iglesia de Santa María la Mayor es el templo parroquial de San Vicente de la Sonsierra. Se construyó en el siglo XVI en estilo gótico tardío. Junto con las ruinas del castillo y la ermita de la Vera Cruz forman un conjunto monumental ubicado dentro del antiguo recinto amurallado de la villa.
La iglesia fue construida en el patio de armas del castillo ubicado en lo alto de un cerro que domina el río Ebro, tras la integración del Reino de Navarra en el Reino de Castilla en 1512.
La torre es el elemento más característico de San Vicente, situada a los pies en la fachada meridional, junto al pórtico. Se trata de una construcción prismática de caras asimétricas, de un solo cuerpo y carente de decoración.
El retablo mayor se trata de una grandiosa estructura renacentista de estilo manierista, aunque con vestigios del anterior estilo plateresco.
Ermita de la Vera Cruz o San Juan de Arriba
Situada dentro del Recinto Amurallado, a un metro escaso de la cabecera de Santa María la Mayor. Se trata de un edificio exento de muy pequeñas dimensiones, formado por una sola nave de un corto tramo cubierto con bóveda de medio cañón apuntando y, separada por un arco triunfal apuntado sobre pilastras, una cabecera rectangular con bóveda de crucería.
La puerta, bajo arco ojival, se abre al mediodía. Seguramente funcionó como capilla del Castillo.
Esta ermita-capilla mantuvo funciones de parroquia de San Vicente de la Sonsierra hasta la construcción en el siglo XVI del templo de Santa María. Desde la mitad del siglo XVII es la sede de la Cofradía de Santa Vera-Cruz de los Disciplinantes, organizadora de la penitencia de autoflagelación pública conocida como los Picaos.
Castillo de San Vicente de la Sonsierra
El castillo de San Vicente es una antigua construcción militar que se ubica en un cerro que domina el valle del Ebro. Se encuentra en la parte más elevada del núcleo urbano de San Vicente de la Sonsierra y forma parte del complejo amurallado.
Es un castillo fortaleza medieval militar construido en el siglo XII por el reino de Navarra para la defensa de su frontera sur con Castilla, en el valle del Ebro.
Basílica de Nuestra Señora de los Remedios
Se construye sobre otraexistente extramuros del pueblo. La imagen de la patrona, una talla de piedra del siglo XIII, hace suponer que la ermita anterior podría ser románica o de transición al gótico, la cual, debido a su estado ruinoso, fue reconstruida en los primeros años del siglo XVIII con las aportaciones de los vecinos del pueblo durando las obras 30 años.
Su arquitectura es del renacimiento neoclásico y el retablo barroco bien dorado y conservado.
La Virgen de los Remedios se convierte en referente fundamental de las devociones locales y de la que la leyenda cuenta que fue hallada casualmente en el término de la Aliende (mirando hacia San Vicente de la Sonsierra) junto con el Cristo de los Remedios de Briones (que miraba hacia Briones).
Ermita de San Roque
Situada dentro del casco urbano cerca de la Plaza mayor, es una pequeña construcción barroca de comienzos del XVII.
Antiguamente fue ermita románica extramuros y estuvo dedicada a dos Santos (San Sebastián y San Roque) pero desapareció, y sobre el mismo solar se levantó en 1775 la ermita actual.
Otras Ermitas de San Vicente de la Sonsierra
Ermita de San Martín de Nava:
Perteneció al poblado de San Martín de la Sonsierra y debió ser una iglesia monástica; de hecho, la explanada en la que se sitúa aún recibe el nombre de “el jardín de los frailes“.
La edificación conservada actualmente pertenece al románico tardío de la segunda mitad del siglo XII o del XIII. Todo parece indicar que un primitivo edifico mozárabe sufrió una reforma en el siglo XIII, en la que se le proporcionó un abovedamiento románico. De este modo, aunque básicamente es una construcción románica, existen indicios para pensar que se edificó sobre otra prerrománica.
Fue restaurada en 1986.
Ermita de San Martín de los Monjes:
No confundirla con la anterior ermita, San Martín de Nava.
La perdida ermita de San Martín de los Monjes, estuvo situada a 1 km de la anterior al oeste y fue iglesia parroquial de otro poblado medieval, el de Mutilluri.
Ermita de Nuestra Señora de la Peña:
En un altozano sobre el camino de Montebuena podemos ver los restos de la Ermita de Ntra. Sra. de la Peña. Al parecer fue construida inicialmente y posteriormente reconstruida ya que existen columnas de dos tipos de arcos diferentes.
Junto a la ermita encontramos un eremitorio de datación mucho anterior, al que se accedía desde el exterior. Al construirse la ermita fue habilitada una entrada desde el interior de ésta.
Necrópolis de San Andrés
San Vicente de la Sonsierra cuenta con una gran necrópolis altomedieval con unas setenta tumbas, restos de una antigua ermita, dos lagares rupestres y una piscina ritual posiblemente reconvertida en lagar.
Hay unas setenta tumbas antropomorfas, con diferentes tipologías. Las inhumaciones de niños y jóvenes alternan con las de los adultos. Así como la tumba 15, que corresponde a una madre y a su hijo.
Excavada en la vertiente sur de la parte más occidental de la necrópolis está la iglesia, cuyos restos enlazan con el límite de una viña. Hoy sólo se conserva el lado norte, tallado a pico, quizás se pueda corresponder con la antigua ermita de San Andrés.
Hay dos lagares excavados en la roca, formados por un gran recinto circular en desnivel, lugar donde se depositaba la uva, y un depósito adosado de mayor profundidad, comunicado con el anterior por un canalillo, en el que se recogía el jugo.
En el borde meridional de la necrópolis hay una piscina ritual con forma rectangular y un desagüe para evacuar el agua, que posiblemente fue reconvertida en lagar. Su fecha de ejecución sería posterior al abandono de la necrópolis, siglos XII o XIII.
Ermita de Orzales y Eremitorios de Gobates
Orzales es una aldea desaparecida que se localizaba próxima a la cima del Toloño y que en la actualidad forma parte del municipio de San Vicente de la Sonsierra.
De esta aldea el único resto que queda es la Ermita de Orzales y se encuentra en peligro de desaparición. Esta iglesia estaba dedicada a San Bartolomé.
Próximos a la ermita de Orzales se encuentran los eremitorios de Gobates. Dos curiosos eremitorios con tumbas antropomorfas en su interior. Uno orientado al este y otro al oeste. En su entorno encontramos varios lagares rupestres y los restos de una antigua construcción.
Se encuentran bien señalizados y se trata de un recorrido que no supone ninguna dificultad.
*Para visitar Orzales y los Eremitorios puedes hacerlo desde la localidad de Rivas de Tereso.
Ojalá esta información te sirva para organizar tu escapada a La Rioja y conocer algunos de los pueblos cerca de Haro más bonitos. Y si también quieres saber qué ver en Haro en este artículo enumeramos los mayores atractivos de la ciudad.
Para más información puedes suscribirte a nuestra newsletter y recibir gratis La Guía para crear tu propia hoja de ruta aquí.